sin título
guardo el charco helado en mis tennis, llamo al perro enlodado que pasa cerca, deslizo el barquito como cuando vivía en villa jardín, se amontonan las hormigotas con alas, dejo escurriendo el paraguas a la entrada, me quedo haciendo galletas de mantequilla. y siento que puedo vivir siempre lo sencillo, porque es aquí donde Lo escucho más cerca del corazón.